Rousseau, S., & Morales, A. (2018). Movimientos de mujeres indígenas en Latinoamérica: Género y etnicidad en el Perú, México y Bolivia. Fondo Editorial de la PUCP.

El libro escrito por Stéphanie Rousseau y Anahi Morales analiza los movimientos de mujeres indígenas más allá de los postulados comunes. Para tal fin, las autoras problematizan la movilización de las mujeres indígenas, se preguntan por qué se movilizan, por ejemplo, en pro de derechos de representación política si generalmente ellas abogan por una fuerte defensa de sus comunidades y pueblos. Estos postulados se consideran hasta cierto punto excluyentes debido a los recursos que se destinan para cada actividad; también porque esta movilización podría ser contraria al objetivo de fuerza colectiva y unidad dentro de una organización indígena. El libro usa un marco teórico que combina estudios de movimientos sociales y feminismo, más precisamente el interseccional, ejemplo de estos son los trabajos de autores como McAdam 1982 (acción colectiva); Tarrow 1994 (identidad colectiva); Bilge (2010), Denis (2008) y McCall (2005) sobre feminismo poscolonial, entre otros.

Las autoras explican las dinámicas en los tres casos de estudio (Perú, México y Bolivia) analizando un factor muy importante: la construcción de la raza y etnicidad en dichos países. Las razones por las que escogen estos casos son principalmente tres: (1) pueden ubicarse en un continuo de menor a mayor nivel de éxito (2) a la literatura disponible y (3) al trabajo de campo realizado entre el 2009-2013 (2009, 2010 y 2012 en Perú, 2011 y 2013 en Bolivia, y en México durante el 2010 y 2011).

En México el movimiento indígena de los 90’s brinda una gran oportunidad a las mujeres indígenas para obtener mayor relevancia política; en Bolivia es el movimiento indígena contemporáneo el que transforma los términos de la política en el país y brinda a las mujeres indígenas más espacios de representación; y en Perú ha sido muy relevante la década del 2000 para la movilización de mujeres indígenas, periodo en el cual más mujeres indígenas lideran tanto organizaciones mixtas como organizaciones exclusivas de mujeres.

El libro encuentra que las dinámicas interna y externa determinan la autonomía que las mujeres indígenas logran y, así, las rutas organizativas que siguen, como por ejemplo la elaboración de un nuevo discurso sobre la indigenidad. El estudio también toma como factor importante el contexto político de los tres países para explicar las oportunidades que puedan llegar a tener las mujeres indígenas (el ascenso de Evo Morales al poder, el movimiento zapatista en México, la creación de organismos para la adopción y reglamentación de la Ley sobre la Consulta Previa en Perú). Lo explicado por las autoras ayuda a entender mejor por qué les tomó cerca de veinte años a las mujeres indígenas politizar su posición al interior de los movimientos sociales, para convertirse en sujetos políticos con voz propia.